Maldita sea, ¿Por qué tuviste que ser padre, mi padre?

Aquí te escribo lo que hasta hoy guardo en mi corazón y lo que durante mucho tiempo he preferido no decir…


Maldigo quererte, deseo que termines solo en un cuarto y sufriendo como hoy, nosotros lo hacemos, y odio saber que cuando llegue ese día, nos pedirás perdón y sin mayor resentimiento estaremos a tu lado para cuidarte y perdonarte; pero no estés tan seguro, tal vez solo sea mi deseo de hacerte ver el daño que estas haciendo y no esperes a quedarte solo para querer recuperar lo perdido.




…Recuerdo cuando era niña y tu estabas conmigo compartiendo mis alegrías y mis penas, luchabas por mis sueños y te envolvías de mis locuras con la facilidad de un abrazo, sentía que yo era lo mas valioso para ti, sentía que yo podía ser tu razón para vivir, que tú eras capaz de dar tu vida con la única razón de verme feliz, sana y salva. Sentía que no necesitaba algo más para ser feliz, y así era, era muy feliz, tenía a mi familia, razón suficiente para estar alegre y sentir compasión por algunas compañeras que solo tenían un padre o una madre que no le podían dar amor suficiente para ser tan feliz como lo era yo. Una niña invencible, pues tenía a dos héroes conmigo y ¿quién podía contra mí?.
Un día, cuando yo ya era toda una mujercita, nos sentaron a mi y a mis hermanitos en la mesa, ustedes habían decidido que lo mejor para todos era su separación, sin consultarlo ni nada, ustedes lo creyeron así y así fue, y prometieron que esto no afectaría en nada con nuestra relación, y esto se veía en los primeros meses, tú aún nos visitabas todas las noches, mi madre te esperaba y como si nunca hubiera existido esa conversación, ella te atendía como a un esposo que llegaba de trabajar; tus visitas fueron siendo menores, ya no llegabas todos los días después de las 8 sino que ahora, tú nos visitabas solo los fines de semana, y mis hermanos, niños aún, empezaron a sospechar que algo no andaba bien, que aquella armonía en nuestros corazones empezaban a sentir los crujidos de una piedra preciosa a punto de colapsar.
Mi hermano te veía como a un héroe, como a una estrella de rock, como una imagen y semejanza de lo que de grande anhelaba ser, y tu te marchaste y empezó a confundirse, a dudar sobre las acciones, a pensar si lo que tú estabas haciendo era lo mejor, o era un acto mas de valentía que nos iba a traer algo mejor, y empezó a callar, a esperar el resultado de aquella desaparición, a aprender a no tener una figura paterna y un ejemplo vivo de hombre, y detrás de esa imagen falsa que creas en tu cabeza, él aún sigue esperando porque tú vuelvas y le cuentes de que se trato todo.


Mi hermana te quería, como todos nosotros, pero ella nunca imaginó un mundo o una familia sin uno de nosotros; tratando de llamar la atención de nosotros, tu atención, creyó que su autodestrucción te haría entender y de decirte lo mucho que te necesitábamos, de lo importante que era tenerte con nosotros para cerrar este círculo donde todos estábamos atados de manos los unos a los otros para que nunca nos caigamos, pero en el camino dos manos cayeron y hoy es difícil de rescatar, pero no imposible de recuperar; y ella siendo una niña, trató de dar su vida por su familia, algo de lo que tu no fuiste capaz, algo que no quisiste hacer y luchar por sellar nuestras vidas con una simple sonrisa tuya, o con solo decirnos TE QUIERO, AQUÍ ESTOY Y NO ME VOLVERÈ A SEPARAR DE USTEDES.
Te mereces terminar tus últimos días en un cuarto con la compañía de una vela y sin nadie a quien llamar para pedirle y rogarle un poquito de ternura, porque yo te lo deseo, porque tu te lo mereces, porque sé que cuando eso pase, tomarás ese bendito teléfono para llamarnos y que nosotros siempre contestaremos para decirte que todo anda bien cuando todo anda mal, pero ahí estaremos nosotros y tal vez nos puedas responder:
¿Cómo hiciste para olvidarnos tan fácil y poder vivir con solo escuchar un minuto de nuestras voces? (a veces desearía que no existieran los celulares y te veas obligado a buscarme)
Y yo?, si y yo, he esperado 12 años para sentarme frente a una computadora cansada de actuar y de mostrarme fuerte ante todos y que espero estar frente a mi almohada para poder olvidar de tener que fingir una alegre, pero alimentada de tristeza, sonrisa y por fin llorar frente a esta almohada que es la única testigo de la verdadera persona que soy dentro de mis cuatro paredes; y escribirte esto que aún no me atrevo a decírtelo en tu cara, a ti que no recuerdo cuando fue la última vez que te vi, que no recuerdo la última vez que me decías que me querías y que hoy ni siquiera me extrañas. Ya no quiero ocultarte esto, ya no quiero que pienses que con tus llamadas cumpliste con el rol de padre, no quiero que pienses que todo anda bien, porque mi corazón esta destruido, porque la imagen de mi padre no se definirla, porque ni siquiera puedo irte a buscar para darte esto, porque no se dónde vives, porque no se dónde trabajas, porque te odio y porque te quiero, porque ya estoy perdiendo las esperanzas de volverte a ver tocando mi puerta y tratando de recuperar todo este tiempo perdido, porque ya no quiero perder mas tiempo, porque aún pienso que no eres tan estúpido como para perder a tus hijos, porque no quiero que sea demasiado tarde para tratar de recuperarme… simplemente porque aún guardo algunos recuerdos en un cofre de oro, que son solo aquellos que quiero llevar toda mi vida en mi corazón.
…Cierro esta memoria, deseando despertar de esta pesadilla y aún tener 8 años y verte dormido al pie de mi cama, arrollándome y esperando que al fin me duerma, aunque tu sepas que tu te dormirás primero, pero sé que ya deje de ser esa niña, pero que aún deseo verte a mi lado.






Los hijos suelen ser la razón de ser mejores, de ser cada día mejor, motivos de lucha, motivos de querer seguir viviendo muchos años más; y más y aún, ver como ellos obtienen tantos logros gracias tus enseñanzas y tu satisfacción de cada día se parecen más a ti.
... Para aquellos Padres, que aún no conocen el verdadero significado que esa palabra significa, para que no pierdan más tiempo y sepan que hay niños que los ven como ejemplos y que algún día sueñan por ser como ustedes; No dejen que el mundo sea gobernado por odio y cultiven el amor
... Y para aquellos que aún tienen miedo de fracasar, no teman a ser felices, amen a su familia y no dejen que nada ni nadie los separe de ellos.


(Tranquilo papá, esto no es una memoria mía, simplemente es la historia de muchas personas que no se atrevieron a ser como tú)

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
hermanito eres grande stoy muy orgullosa x como scribes sabes q tkm y q 100pre vamos a star juntos pase lo q pase nunk lo olvides mi pichon
katty ha dicho que…
cuanto talento !!!!genial

Entradas populares de este blog

Mi camino será guiado por ti…

“Un Chato de altura: Oscar Del Portal”

Lima 13